martes, 3 de noviembre de 2009

Recursos educativos: Había una vez un pais... en el sur.

En esta nueva publicación, quería darles a conocer mi elección sobre el recurso didáctico que a mi parecer es uno de los más pertinentes para la enseñanza; dicho recurso se encuentra publicado en el sitio web educ.ar y es el que responde al nombre: Había una vez un país… en el sur.
Este recurso, trata la enseñanza de las ciencias sociales y para esto propone “información básica sobre la Argentina”, “actividades para el aula y efemérides” y por último, propone “recursos (imágenes y videos)” para el abordaje de los contenidos de dicha área.
Dentro de los recursos propuestos, se encuentran: “la Argetina en mapas, videos y galería de imágenes”. Basándome los aportes teóricos de Alfonso Gutiérrez Martin, puedo decir que dichos recursos permiten la adquisición del aprendizaje, por parte del alumno, de una manera dinámica y comprometida, ya que los mismos exigen que el alumno desarrolle, en principio, distintas destrezas y exponga de manera explicita sus conocimientos previos para que la utilización de estos recursos proporcionen una educación satisfactoria.
En este sentido, me permito citar al autor ya que el mismo expone que: “ (…) hay que tener en cuenta que el aprendizaje con multimedia supone una serie de operaciones mentales y físicas simultáneas por lo que las aplicaciones de estructura muy compleja pueden dificultar el aprendizaje por un exceso de carga cognitiva. Por el contrario, aplicaciones muy simples y lineales pueden ser resultar aburridas, demasiado fáciles y poco motivadoras.” En relación a esto, puedo decir que los recursos si bien son de un alto nivel de ayuda para el docente, si se emplea de manera inadecuada, puede resultar un obstáculo en el aprendizaje de los niños; ya que no respondería a los niveles cognitivos de los mismos.
Por esta razón, es preciso evaluar la dimensión didáctica de una aplicación multimedia interactiva; para esto podemos, en primer lugar, comprobar si en ésta se especifican unos objetivos educativos bien definidos; y si viene acompañada de guía didáctica y materiales complementarios para profesor y alumnos. Al realizar el análisis del recurso presentado, puedo decir que el mismo incorpora en la propia aplicación, una guía didáctica y material complementario; por otra parte, el programa proporciona facilitadores del aprendizaje, tales como índices o estructura de los contenidos; ejercicios de comprensión y de repaso; guías de navegación; resúmenes, recapitulaciones y conclusiones; propuestas de trabajo en grupo; entre otros.
Otro aspecto a valorar, en lineamientos del autor,es la flexibilidad y la capacidad del programa que posee para adaptarse al nivel y ritmo de cada alumno, proporcionando información al mismo sobre el avance en la consecución de los objetivos, así como prácticas de evaluación de varios tipos.
Para finalizar, es interesante analizar el papel que juegan profesor y alumno. Si se supone que el profesor tiene que explicar en qué consiste el programa y qué se espera del alumno, si se le supone además una fuente de información sobre los contenidos de la aplicación, si es facilitador del aprendizaje más que de información, si tiene que relacionar los aprendizajes que se consigan con la aplicación multimedia con otro tipo de aprendizajes y temas del currículo oficial, si evalúa los aprendizajes y el uso de la aplicación, si puede elegir unos determinados objetivos o metodología sobre otros, etc. En este sentido, es preciso señalar que propongo una labor docente de acompañamiento y guía del aprendizaje; no se trata solo de presentar el recurso y dejar a alumno de manera solitaria para que se enfrente a dicho recurso; sino que, por el contario, el docente debe ser quien guíe al alumno para que el mismo alcance la adquisición del contenido trabajado de manera significativa.

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